Dice un viejo refrán que ‘para gustos, los colores’. Lo cierto es que con el paso del tiempo el fashion system ha roto muchos paradigmas, y ahora por medio de las campañas de primavera-verano 2015, han ovacionado a dos tipos de belleza: la belleza natural y –otras como siempre- la artificial, siendo la primera el último grito dentro del ecosistema fashion y trending topic en las redes sociales.
Por un lado, cuando pensábamos que las marcas se decantaban en todas sus formas por hacer un culto al photoshop, ahora con la mirada en la próxima temporada celebran la naturalidad en su estado más puro. Los rostros rígidos y glossy le dieron paso a fotografías en donde los signos de la edad son el mayor atributo, y en la que las personalidades que las protagonizan son ‘reales’. Con 80 años, la escritora Joan Didion se convierte en el rostro de la nueva colección de Céline; Joni Mitchell con 71 tiene la misma labor en Saint Laurent Paris, Madonna se convierte una vez más en musa de Donatella Versace, e Iris Apfel – junto a Karlie Kloss- para Kate Spade. Es como si la moda buscara acercarse al lado más humano de la sociedad.
En la otra cara de la moneda tenemos exposiciones de recursos visuales mucho más recargados. No solo por los colores o la excentricidad de los personajes aparecen en las dotografías, sino por la falsedad de sus formas y texturas en el resultado final del ejercicio. Roberto Cavalli recurrió a la controversial Nicky Minaj para ser imagen de su campaña, Naomi Campbell es el rostro de Burberry, y como era de esperarse, Kim Kardashian es la apuesta de Balmain.
¿Natural o artificial?. Te invitamos a juzgar los resultados finales de los experimentos de los directores creativos y decidir si estas a favor o en contra de la nueva moda de la moda.
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