A todos nos gusta el color; hace que los días tristes se vuelvan alegres, resalta nuestra piel y nos hace parecer mucho más jóvenes y enérgicas. Pero como con todo, hay que tener cuidado. Un exceso de color o una mala combinación nos puede llevar directamente a un desastre estilístico digno de ese payaso que anunciaba una marca de detergente.
Pero a pesar de que haya que tomarlo con cautela, el color no está en ningún momento reñido con la elegancia. Porque todas, cuando pensamos en el paradigma de la elegancia, siempre pensamos en un total look negro. Y si bien un «little black dress» siempre puede salvarnos la vida. Por eso, apostar por el total look blanco es la opción más segura; porque como reza el dicho popular, los opuestos se tocan.
Así , con nuestro look blanco en mente que nos asegure esa elegancia tan anhelada y nos salve del calor excesivo, nuestra siguiente misión es darle un toque alegre a través del color. Y color y verano solo pueden confluir en una cosa: flúor.
A través de los accesorios, cualquier «total look white» puede convertirte en la mejor vestida de la fiesta sin caer en el aburrimiento. Nosotros te proponemos algunas ideas para usar con moderación. Porque elegancia y color sí que van de la mano.
Uno de los mayores placeres del verano es, sin lugar a dudas. Resáltalo acompañando tu «total look white» con una chatas flúor que hagan que seas la más especial.
Perfectas para acompañar tu estilismo blanco.
Una pequeña mochila es, sin duda, la mejor de las soluciones.
Lo bueno de los collares en tonos ácidos es que son perfectos para acompañar a ese look básico pero chic. elige uno juvenil y divertido pero con mucha clase.
Más es menos, y a veces solo necesitamos un twist muy sutil de flúor para hacer nuestro look más interesante. Un anillo que marque la diferencia para dominarlos a todos y atarlos a tu blanco magnetismo.
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